“Master Of None” es un homenaje a lo cotidiano, pero que pone sin disimulos el acento en cuestiones y situaciones a las que debemos enfrentarnos diariamente, cual sea nuestra respuesta cotidiana y personal a dichas cuestiones y situaciones, marcará nuestra relación con el mundo y con nuestros congéneres de forma irremediable.
Serie que podéis ver en Netflix, a fecha de hoy consta de dos temporadas. Si la primera de ellas es buena, la segunda es extraordinaria. Estamos ante una comedia, pero no estamos ante una comedia cualquiera, porque el guión no para de hablarnos de cosas realmente importantes, haciéndolo de una forma digerible que huye de la pretenciosidad.
El indio Aziz Ansari es su protagonista al tiempo que es el creador de la serie; lo cierto es que ha recibido críticas elogiosas por doquier, que creo que están más que justificadas. Ansari es honesto con el espectador, de una forma sencilla nos sumerge en lo cotidiano con gran habilidad, logrando que esa cotidianidad sea el instrumento para decir todo lo que le apetece decir sobre un inacabable abanico de asuntos que a nadie nos son ajenos.
Se ha llegado a apuntar que la forma de hacer de Ansari tiene mucho que ver con el estilo de las películas neoyorquinas de Woody Allen. La propia ciudad o los diálogos chispeantes en tono de comedia que resultan ser bombas de profundidad pudieran justificarlo, aunque personalmente no comparto esta visión. Los odiadores de Allen mal harían en descartar la serie por ese motivo, Ansari tiene voz propia y un sentido de la comedia muy personal.
Me permitiré enumerar una serie de temas que a lo largo de las dos temporadas van a estar presentes, “la familia, la vejez, las minorías étnicas, el machismo, la religión, la homosexualidad, el mundo de la televisión, las relaciones de pareja, el quiénes somos y quiénes queremos ser”. Bien es cierto que se podría pensar que el inventario es demasiado extenso como para ser abarcado en dos temporadas, pero lo sorprendente es que todos esos asuntos se tocan adecuadamente, e incluso algunos de ellos en capítulos monográficos, entre estos últimos reseño el de las citas, el del machismo o el del día de acción de gracias, que me han parecido magistrales. Y por si esto fuera poco, Ansari aún tiene tiempo para realizar homenajes cinematográficos como el del bellísimo primer capítulo de la segunda temporada, rodado en Italia en blanco y negro.
El resto de personajes que giran alrededor de Ansari son el complemento perfecto, sus amigos Arnold y Denise enamoran, Rachel y Francesca como parejas de Ansari te roban el corazón; eso es así porque Ansari no quiere que los veamos como personajes de ficción, sino como lo que verdaderamente son, personas reales alejadas de estereotipos.
Es seguro que el espectador se verá retratado en algunas situaciones que la serie nos muestra, y también es seguro que se reconocerá en un sinfín de diálogos que le resultarán muy familiares. La razón de que esto suceda estriba en que Ansari nos coloca con verdad ante lo cotidiano, nos sitúa ante aquello que vivimos y sentimos en nuestro día a día consciente o inconscientemente.
“Master Of None” es un homenaje a lo cotidiano, pero que pone sin disimulos el acento en cuestiones y situaciones a las que debemos enfrentarnos diariamente, cual sea nuestra respuesta cotidiana y personal a dichas cuestiones y situaciones, marcará nuestra relación con el mundo y con nuestros congéneres de forma irremediable.